Los dolores de origen mecánico, como aquellos causados por malas posturas o alteraciones del aparato locomotor, son algunos de los más frecuentes entre los pacientes que acuden a terapias físicas. Así lo señalan los especialistas Denis Mozo Ávila, coordinador de Neurorehabilitación, y la Dra. Sandra Morrión, del servicio de Medicina Física y Rehabilitación del Complejo Hospitalario Alberto Barton.
La fisioterapia es un tratamiento que emplea medios no invasivos, como la aplicación de agentes físicos (frío, calor, electroterapia, magnetoterapia, entre otros), para promover la recuperación precoz de una patología o lesión. “La fisioterapia puede aliviar el dolor, mejorar la fuerza muscular y la movilidad, prevenir y controlar el deterioro físico, optimizar las funciones básicas del organismo e incluso apoyar la recuperación tras una cirugía mayor. También es un gran aliado en la prevención de futuras lesiones y en el tratamiento de determinadas patologías crónicas”, sostienen los especialistas.
La Dra. Sandra Morrión hace hincapié en la importancia de acudir al terapeuta físico cuando se tiene un diagnóstico certero de la patología que nos afecta y buscamos un enfoque conservador para tratarla o revertir un cuadro inicial. Además, señala que el terapeuta físico puede brindar consejos útiles a la hora de realizar actividad física, así como pautas para mantener una correcta postura y lograr un bienestar general.
¿Cómo ayuda la fisioterapia en la vida diaria?
- Mejora de la calidad de vida: Al aliviar el dolor y mejorar la movilidad, se pueden reanudar las actividades cotidianas con menos molestias.
- Prevención de lesiones: Aprender y practicar ejercicios terapéuticos y estiramientos adecuados reduce el riesgo de futuras lesiones, tanto en la vida diaria como en la práctica deportiva.
- Rehabilitación tras cirugías: Tras operaciones mayores, la fisioterapia acelera la recuperación y ayuda a retomar las actividades habituales de forma progresiva y segura.
La experiencia en el Complejo Hospitalario Alberto Barton
En el Complejo Hospitalario Alberto Barton de EsSalud, se atiende a un promedio de 500 pacientes mensuales solo en el área de terapia física. De ellos, un 45% son derivados de la especialidad de Traumatología, seguidos de pacientes de Medicina Familiar (24%) y, finalmente, de Pediatría (15%). Este volumen de atenciones demuestra la alta demanda de tratamientos físicos y la relevancia que tienen en la recuperación y el cuidado de la salud.
Recomendaciones para aprovechar al máximo la fisioterapia
- Consultar con un especialista: Antes de iniciar cualquier terapia, es fundamental contar con un diagnóstico claro para orientar el tratamiento de manera eficaz.
- Cumplir las indicaciones en casa: La fisioterapia no termina en el consultorio; los ejercicios y pautas indicadas deben practicarse regularmente para obtener resultados óptimos.
- Mantener una comunicación abierta: Informar al terapeuta sobre cualquier molestia o duda permite ajustar el tratamiento y mejorar la respuesta al mismo.
- Adoptar buenos hábitos: Cuidar la postura, descansar lo suficiente y mantenerse físicamente activo contribuye de manera significativa a la prevención de dolores y lesiones.
En definitiva, recibir sesiones de fisioterapia no solo ayuda a paliar dolores y molestias físicas, sino que contribuye a mejorar la calidad de vida en general. Con la asesoría de un profesional y un plan de tratamiento personalizado, es posible volver a disfrutar de las actividades diarias con menos dolor y mayor seguridad. Si sientes alguna molestia recurrente o acabas de pasar por un proceso quirúrgico, considera acudir a un especialista en fisioterapia para evaluar tus necesidades y encontrar la mejor ruta para tu recuperación.